En The Dalmore, creemos que la vida no se trata de ser un artículo terminado, sino de esforzarse por ser lo mejor que puedes ser: alcanzar tu potencial. Para nosotros, esto significa aprovechar el potencial de cada gota de whisky. Nos aseguramos de que cada botella de The Dalmore no sea solo un whisky de pura malta excepcional, sino que sea realmente la creación de una obra maestra.
Llevamos más de 180 años elaborando obras maestras en nuestra destilería a orillas del Cromarty Firth. A través de una cadena ininterrumpida de fabricantes de whisky visionarios, el nuestro es un whisky de pura malta verdaderamente excepcional.
Aunque llevamos más de 180 años destilando whisky, no podemos decirle cuál es nuestro mejor whisky. Por la sencilla razón: aún no lo hemos logrado.
Cuando los descendientes del Clan Mackenzie se convirtieron en propietarios de la destilería The Dalmore en 1867, el Royal Stag se convirtió en el ícono reconocible que hoy adorna con orgullo cada botella de The Dalmore; un emblema que resume un rico pasado.
En The Dalmore, continuamos con una herencia milenaria que atesora la santidad del barril. Nuestro precioso licor se enriquece en barricas excepcionales, seleccionadas a mano por el maestro destilador, Richard Paterson, y provenientes de las mejores bodegas y bodegas exclusivas del mundo.
Para crear un carácter más complejo, algunos de nuestros whiskies se benefician de un toque extra en barricas adicionales. Cada barrica que obtenemos es de una calidad impecable y está seleccionada a mano para producir nuestro renombrado whisky de malta única.
